Los muiscas era una comunidad indígena que habitaba la zona del altiplano cundiboyacense. A ellos se les atribuye la creación de una primera versión del ajiaco. Conocidos por el uso del maíz en casi todas sus preparaciones, en la época de la colonia comenzaron a preparar una sopa con una combinación de papas, maíz y cebolla. A principios del siglo XIX, esta sopa se heredó a los artesanos y trabajadores quienes le incluyeron pollo.
El ajiaco santafereño se ha convertido en un plato estandarte de Bogotá. Generalmente se hace con pollo y tres tipos de papa, mazorca y una hierba llamada guasca. Esta hierba le da al ajiaco su sabor característico. Algunas personas colocan en la mesa alcaparras y crema de leche para que los comensales las agreguen si así lo prefieren.
Ingredientes:
1 pechuga de pollo
1 mazorca de maíz biche
1 cebolla larga
2 dientes de ajo
3 cucharadas de cilantro picado
2 tazas de papa criolla
3 papas blancas medianas
3 papas rojas medianas
1/3 taza de guasca
Agua c/n
Retire el pollo y reserve. Continuar la cocción, retirar la cebolla larga y añadir las papas rojas y blancas, peladas y cortadas en rodajas. Si es necesario agregue más agua. Cuando las papas estén cocidas destape la olla y agregue las papas criollas y la guasca.
Mientras, desmenuce el pollo y agréguelo a la sopa. Cocine a fuego lento durante 20 minutos más. Rectifique la sazón y sirva caliente con alcaparras y crema de leche.